21 marzo 2007

¡Vuelve, vuelve... Que te espero!

Primavera...

Epoca del año en que las endorfinas segregaran como nunca lo hacen durante todo el año. Los pajaritos trinan, las flores aparecen en los botones, los paisajes se tornan coloridos y reaniman el sentir de cualquier mortal.

Dicen por ahí que las vibras fluyen con mayor facilidad, que el "timing" (termino que he empezado a adoptar gracias a un par de grandes amigos) es mas fácil de detectar y que todo se ve con diferentes ojos.

Y aunque suene a comercial de televisa o tv azteca vanagloriandose de la llegada de esta epoca la cual solo nos traera un cambio climático, el cual seguramente ira mas alla de lo esperado por la manera en que no dejamos de destruir nuestro planeta y los metodos que utiliza para responder a esto, yo la espero con ansia y regocijo.

Tengo que aceptar que este año en particular me emociona un poco la llegada de esta estacion, ya que siempre he escuchado decir a muchos de mis amigos que es cuando los animos cambian y las hormonas y emociones se alteran mas de lo que a nuestras cortas edades deberian. Me emociona por que igual este año cambia mi vida por alguna u otra situación que he estado e intentando procurar.

Yo dejare que llegue y me empape con sus bendiciones (si es que trae alguna consigo) y si no, simplemente tendre que lidiar con el calor que va a influir en el medio ambiente de nuestra bonita y colorida ciudad.

¿Se lee bien chido, no?

Falta que sea cierto y que en verdad traiga su tortota bajo el brazo.

Por lo pronto me ha traído música, me ha triado nuevas amistades y me ha triado un buen golpe que ha terminado de abrirme los ojos a la difícil e interesante vida que se me sigue poniendo en frente.

Por el momento me da gusto seguir comiendo un chocolate todos los días el cual hace que mi hipotálamo se ponga a trabajar a marchas forzadas y me haga producir las razones por las que existe este blog.

Bien dicen los nutriologos y expertos que la ingesta diaria de un chocolate nos asegura un día en el que será mas difícil que nos deprimamos, pongamos tristes o que simplemente baje nuestro animo.

He tratado de mantenerme bien, pero nunca esta de mas un empujoncito todos los días.

Puedo decir orgullosamente que...

¡LO HE LOGRADO!